oscuridad

La madrugada comenzo sin ti, mientras la noche se llevaba nuestras almas, y las estrellas caían en tu pecho como mariposas indecisas, pronto extrañe tus ojos iluminando las sombras, iluminado el sendero de los ángeles, iluminando el vuelo de los pajaros olvidados. Entonces subí a la cima y te busque entre las nubes, en el silencio tampoco estabas, ni en la melancolía, ni en la soledad. De pronto el ultimo rayo de sol desapareció entre las copas de los arboles. y te vi, casi transparente, apenas aferrada al crepúsculo, dejandome el ultimo destello, el ultimo resplandor, antes de dejarme en el olvido, en plena oscuridad.

silencio

Te mire fijamente mientras la lluvia caía en las planicies. la vida giraba alrededor de nosotros. tu en silencio mirando el silencio, yo en silencio mirando tu silencio.
Entonces la oscuridad nos cubrió lentamente, cubriendo nuestros cuerpos, cubriendo nuestras almas, cubriendo nuestro silencio.

invierno

Aparecí derrepente entre colinas blancas. la eternidad del lugar es como el amor que siento por ti. la soledad se respira lentamente. entonces recuerdo a mi hijo, que surco estos cielos en días de invierno. con sus alas casi transparentes, me enseño a volar.
Me he quedado todo el día sentado aquí, viendo la nubes pasar. quizás venga un ángel y me lleve de regreso a casa, quizás venga Dios y se siente un rato conmigo. quizás solo venga el invierno, y me deje olvidado aquí.

olvido

Amanecí entre la humedad y la nostalgia. venia desde las profundidades, de un viejo océano, de un niño corriendo entre los arboles, mientras el sol quemaba el horizonte. vengo de tan lejos que ya no se quien soy, y quien me amo entre las cañas de azúcar o bajo las eternas lluvias del sur o cuando mi madre, acaricio por ultima vez mi pelo. tan lejos queda el olvido, mas allá del amor, quizás mas allá de la muerte.
He venido de tan lejos que los ángeles no me reconocen, ya las estrellas no son las mismas. y Dios, se quedo mirándome y se marcho.

Bajo el arbol

El sol brilla, como nunca antes. los aeroplanos surcan el cielo azul en silencio y la montaña apenas respira, solo susurros al viento. y yo bajo el árbol, apenas descubriendo la vida. con mis pequeños dedos, tratando de tocar las nubes. y mi corazón que late cada vez mas fuerte, hasta que revienta y salpica todo el cielo, dejandolo con un millón de estrellas.

viaje

Esta noche me fui de viaje, rumbo hacia el universo. quería descubrir algunas estrellas o algún planeta perdido en la oscuridad. Pero me encontré con una senda llena de luz y muchos ángeles que recorrían el espacio en puntas de pie. Me detuve un instante a contemplar los brillos y el silencio del infinito. solo pude llorar y reír a ratos, mientras los ángeles se alejaban con cantos de ballenas y silencios de eternidad.

espera

Comienza a oscurecer. el sol tibio apenan se balancea en una triste nube, y algún pájaro perdido todavía revolotea a ciegas en las sombras. Quizás deje el fuego mas tiempo esta noche, quizás quieras volver sin decirme nada y solo abrazarme. mientras el crepúsculo arde lentamente. quizás no regreses y me quede parado bajo el portal esperando, solo esperando. Otra noche llena de ti, otra noche sin mi.

vuelo

Hoy vine volando. y me detuve un segundo en una pequeña flor. apenas mis largas piernas cabían en los pétalos. una brisa recorría suavemente mis delgadas antenas y el cielo mas azul que nunca, me recordaba tus grandes ojos. Que vida tan peculiar, tan dulce y tan oscura aveces. Regrese rápidamente bajo las gigantes hojas del viejo árbol. ya venían las inmensas nubes cubriéndolo todo, hasta mi pequeña sombra, en el fondo del valle.

casi eterno

Bajo tu mirada me fui perdiendo, creyendo por un segundo en la eternidad. luego viniste tan clara y oscura a la vez, para pedirme el ultimo beso, y entonces marcharte. volando entre los planetas y mis dedos.

tú

Te reiste de mi y te fuiste corriendo con las manos en la cara.